No hay más allá. Ni en tiempo ni en lugar. El universo se reducirá a una arena. Ni pasado ni futuro. Sólo el aquí y el ahora. Y durante tres periodos o más dentro de un coliseo moderno, el mundo exterior deja de existir. El tiempo se detiene excepto para el reloj del partido.
Es el séptimo partido y no hay nada más.
Los Vegas Golden Knights y Dallas Stars han preparado su escenario. Tres victorias para cada uno en una carrera a cuatro a la que sólo le queda una oportunidad.
La oportunidad y el final se avecinan. Tras los apretones de manos, un equipo y su ciudad mirarán hacia un nuevo horizonte. El otro se quedará pensando en sus escombros.
¿Un campeón tambaleante pero capaz de enderezarse y asestar un golpe de gracia? ¿O un grupo empeñado en vengarse que por fin consigue comerse un plato servido sobre hielo?
Los jugadores determinarán el resultado. El resto sudaremos y nos retorceremos. Es uno de los sentimientos más desesperados de la vida. Todo lo que uno puede hacer es animar. Y esperar.
"Son las consecuencias, ¿verdad? Es ganar o irse a casa. Creo que a todo el mundo le encanta ese reto. Quiero decir, estos chicos son muy competitivos por ambas partes," respondió el entrenador de Vegas, Bruce Cassidy, cuando se le preguntó por qué el séptimo partido es tan especial. "Normalmente, cuando se llega tan lejos, se ha creado una animosidad mutua por un lado, pero respeto por el otro, ¿verdad? Porque te enfrentas a buenos atletas. Así que creo que se trata simplemente de esa naturaleza competitiva. Te gano, ganamos esta noche, avanzamos y eso es todo. La mayoría de los mejores atletas son personas muy motivadas, así que creo que eso les motiva aún más."
El entrenador de Dallas, Pete DeBoer, tiene un notable récord de 7-0 en los playoffs de la Stanley Cup. Se sacudió la decepción de una derrota en el Juego 6 en Vegas el viernes por la noche e inmediatamente comenzó a mirar hacia el Juego 7 del domingo.
"Nos conocemos bien. Ahora se trata de descansar y recuperarnos. Y prepararnos. De esto se trata. Este es exactamente el lugar en el que quieres estar. Jugar para avanzar. Un partido en casa. Y dejarlo volar," dijo DeBoer. "No hay nada mejor que un séptimo partido. Es con lo que creces soñando. Lo mejor es jugar en ellos y lo segundo mejor es entrenar. Estoy emocionado. Emocionado por nuestro grupo y por nuestros aficionados de Dallas. Volvamos a casa y dejemos caer el disco."
Vegas ganó los dos primeros partidos de la serie y luego Dallas encadenó tres victorias consecutivas. Los Golden Knights contraatacaron con su mejor juego de la serie y ganaron el sexto partido por 2-0. Vegas ha marcado 15 goles en la serie, mientras que los Stars han logrado 14. En más del 87% de los partidos, la diferencia ha sido de un gol. Hay muy poco que elegir entre los equipos.
"Probablemente sea una de las series más igualadas en cuanto al marcador. Nadie ha sido capaz de tomar la delantera. La gente ha tomado, no quiero decir un dominio absoluto de esta serie porque no es la forma correcta de decirlo, pero teníamos una ventaja de 2-0. Ellos tenían una ventaja de 3-2, ¿verdad? Ellos tenían una ventaja de 3-2, ¿verdad? Ha oscilado, pero los partidos seguían siendo igualados mientras oscilaba," dijo Cassidy. "Y es divertido oír a esta gente decir 'si me hubieras dicho que estaríamos en el séptimo partido, estaría contento y todo eso'. Creo que para los dos es como si fuéramos ganando 2-0 y no pensáramos en el séptimo partido. Ellos ganaban 3-2 y no pensaban en el séptimo partido. Ninguno de los dos está contento necesariamente por cómo ha acabado. Creo que ambos estamos contentos de estar aquí. Son las dos caras de la moneda. Así que esa es la otra parte de esta serie, ha sido realmente entretenida e interesante con los cambios y aquí estamos. Probablemente sea apropiado que sea un séptimo partido y creo que estará muy reñido y si podemos hacer las jugadas correctas de nuevo en el momento adecuado, entonces me gustan nuestras posibilidades. Teníamos una plantilla y nuestro sexto partido ha sido el más parecido de los seis a cómo queremos jugar y espero que podamos seguir así."
Ambos equipos han tenido momentos álgidos en la serie. Dallas estuvo excelente en los partidos 3, 4 y 5. Para Vegas, que cojeó durante la temporada regular y finalmente consiguió reunir a toda su plantilla para el primer partido de los playoffs, le ha llevado un tiempo coger el ritmo.
El sexto partido no fue perfecto para los Golden Knights, pero se acercó mucho más a lo que querían.
"Creo que la clave fue conseguir que nuestros chicos fueran pacientes con lo que había disponible ofensivamente," dijo Cassidy, cuando se le preguntó por el rendimiento de su equipo en el 6º partido. "Creo que si podemos aceptar y preguntarnos '¿puedes ganar un partido 1-0, 2-1 cuando eso es lo que tienes delante?' y transmitir ese mensaje. Anoche pudimos hacerlo. Nos mantuvimos firmes. No nos salimos de nuestro juego. Creo que en el segundo periodo, hubo un par de momentos, siempre va a haber un poco de helter skelter por así decirlo, pero algo de eso va a ser lo que sucedió en la jugada anterior arriba y abajo del hielo. No puedes controlarlo, pero en lo que respecta a no tomar la opción disponible, creo que nos alejamos un poco de eso, pero volvimos a los raíles. Creo que ése es el mayor reto. Conseguir que nuestro equipo mantenga el rumbo en un partido con pocos goles. Anoche lo hicimos bien y espero que ellos hayan visto el valor de eso y seamos capaces de hacerlo mañana."
Ambos equipos saben ahora lo que deben hacer para vencer al otro. Y es probable que el ganador tenga que hacer un partido casi perfecto. Un error podría marcar la diferencia. El séptimo partido de los playoffs es como caminar por la cuerda floja. Si te resbalas, se acabó.
Quién puede ser perfecto es la pregunta del domingo. La respuesta es absoluta y definitiva.
