"Es un tributo a nuestro grupo, juegue quien juegue, competimos y jugamos duro", dijo el entrenador en jefe interino de los Panthers, Andrew Brunette, sobre la actuación de su club ante los Senators. "Hacemos las cosas correctas, jugamos de la manera correcta y hemos aceptado lo que estamos tratando de hacer. Fue divertido".
Con el resultado del jueves, los Panthers se convirtieron en el séptimo equipo en la historia de la NHL que registra 58 victorias en una temporada. Es una hazaña que solo ha sido lograda por tres franquicias hasta la fecha. Florida se unió a los Montreal Canadiens (3 veces) y Detroit Red Wings (2) de los Original Six (los seis equipos originales de la NHL) y a su rival estatal, el Lightning (1).
El conjunto floridano podrá lograr su triunfo número 59 frente a los Montreal Canadiens.
Los Panthers entrarán a los Playoffs bastante motivados, pues han ganado 14 de sus últimos 16 encuentros.
"Creo que solo estamos tratando de encontrar nuestro juego y hacerlo nítido, hacer que todos los detalles sean nítidos", indicó el delantero centro Carter Verhaeghe. "Cómo llegar a conocer los sistemas, ser sólido con los sistemas. Creo que todos están tratando de trabajar en su juego y de mejorar, y prepararse para los playoffs".
Profundidad contundente
Florida encaró el duelo del jueves sin varias de sus principales figuras, pues Brunette les quiso dar un descanso.
Los delanteros Aleksander Barkov, Jonathan Huberdeau y Claude Giroux, y los defensas Gustav Forsling y MacKenzie Weegar estuvieron ausentes.
Pero, aun así, los Panthers fueron contundentes y le pasaron por encima a los Senators que ya están pensando en la siguiente temporada.
"Creo que fue muy divertido para los muchachos que estuvieron a un lado ver a otros triunfar", dijo Brunette. "Así han sido ellos durante todo el año. No les importa quién recibe la atención o quién marca los goles, todos están felices el uno por el otro. Yo lo he dicho un millón de veces, pero eso es lo que hace que este grupo sea realmente especial".
A la ofensiva, Verhaeghe lideró la victoria con dos goles. Y Sam Bennett y Sam Reinhart se apuntaron un tanto y una asistencia cada uno.
"Cualquier persona con la que juegues en este equipo es realmente un buen jugador", señaló Verhaeghe. "Tienes suerte de jugar con cualquiera, pero mi línea tuvo buena química. Eetu Luostarinen estuvo realmente bien, y Maxim Mamin con su velocidad, estaba haciendo muchas jugadas. Tuvimos la fortuna de haber conseguido un par de goles".