MacKinnon volvió a deslumbrar en Florida

No ha sido una temporada fácil para los vigentes campeones de la Stanley Cup. Desde múltiples lesiones hasta inconsistencias de todo tipo, el Avalanche no ha podido reeditar lo hecho hace un año. Al menos hasta ahora.

Colorado parece estar encarrilando su campaña en el momento adecuado, justo a tiempo para la recta final del campeonato.
Para el 12 de enero, cuando cayeron por la mínima ante los Blackhawks, el Avalanche se ubicaba a seis puntos del segundo Comodín de la Conferencia del Oeste y a siete unidades del Wild, en la puja por el tercer lugar de la División Central.
Pero en ese momento el equipo parece haber cambiado. Los dirigidos por Jared Bednar suman récord de 8-2-1 desde entonces para mejorar su marca en el año a 28-19-6, 60 puntos; suficiente para desplazar a Minnesota en el tercer lugar de la división.
Gran parte de esa reacción es debido a la presencia constante de su mejor jugador: Nathan MacKinnon, quien, a pesar de haber disputado apenas 39 partidos, su impacto en el hielo ha sido notable para los monarcas de la NHL.
Y el partido del sábado fue un ejemplo conciso de ello. El Avalanche se recuperó luego de sufrir un blanqueó el jueves ante el Lightning superando a los Panthers 5-3 en el FLA Live Arena, con una ofensiva que generó hasta 50 disparos de gol y tuvo a MacKinnon como héroe, en el mismo hielo en donde se reunieron todas las estrellas del deporte una semana atrás.

"Tuvimos muchas oportunidades", señaló el delantero. "Ya nos tocaba. Finalmente explotamos".
A pesar de un par de intentos de los Panthers, que hicieron del encuentro uno interesante, ciertamente Colorado llevó la batuta del juego durante la mayor parte de los 60 minutos.
Logan O'Connor abrió la papeleta para los visitantes, seguido por un gol del jugador de ascendencia mexicana Matt Nieto. Colorado se fue al primer intermedio arriba por dos goles.
En el segundo tramo, Florida logró igualar el marcador con tantos de Aaron Ekblad y Sam Bennett, pero el Avalanche se tardó menos de 30 segundos en volver a tomar la delantera, a manos de Devon Toews. A partir de ahí, MacKinnon anotó dos goles, por uno de Aleksander Barkov de los Panthers, para darle cifras definitivas al compromiso.
"Lo que más me gustó fue nuestra reacción luego del 2-2", señaló el entrenador Bednar. "Creo que jugamos un buen hockey para tomar ventaja de 2-0. Una vez ellos anotaron dos y comenzaron a tomar confianza, me puse un poco nervioso, pensando en cómo reaccionaríamos. Pero ahí mismo llegó la respuesta. Me gustó lo que hicimos hoy".
Claro, gran parte del mérito se lo lleva MacKinnon, quien terminó la noche con dos goles y una asistencia, para alcanzar 16 goles en la campaña y llegar a cinco juegos consecutivos con al menos un punto, racha en la que suma siete unidades (3-4).

Pero eso no lo es todo. El delantero de 27 años llegó a 34 juegos de por vida con dos goles o más y a 59 encuentros con al menos tres unidades, renglón en el que sólo es superado por Joe Sakic (158), Peter Stastny (128), Michel Goulet (98) y Peter Forsberg (92) en la historia de la franquicia.
"Mantuvimos la calma toda la noche", señaló MacKinnon. "Así fue incluso en la parte final. Creo que manejamos [la desventaja numérica] realmente bien. Ese 6-contra-5 fue bueno de ver".
Adicionalmente, MacKinnon se acreditó el gol del triunfo para su equipo, siendo el 47mo que anota en su carrera, suficiente para igualar con Michel Goulet por la tercera mayor cantidad en la historia del Avalanche/Nordiques -- superando únicamente por Sakic (86) y Milan Hejduk (59).
Sería difícil saber dónde estaría el club sin Mikko Rantanen (34-27--61), quien ha cargado con el peso del equipo durante la ausencia de varios de sus compañeros. No por nada es líder en goles y puntos de su equipo. Sin embargo, lo hecho por MacKinnon, en tan poco tiempo, es digno de resaltar.
A pesar de haber estado en el hielo mucho menos (39 juegos por 50 de Rantanen), su impacto ha sido evidente. El delantero ya suma 55 puntos en el año (14-41) y lidera a su club en asistencias.
De hecho, MacKinnon promedia 1.45 puntos por partido en lo que va de campaña, lo que lo ubica en el cuarto lugar en la NHL, sólo por detrás de los 1.83 de Connor McDavid, 1.53 de Leon Draisaitl y 1.48 de Nikita Kusherov. De terminar el año así, ese promedio representaría el mejor en la carrera de MacKinnon, igual que la media que presenta de 1.05 asistencias por encuentro.
Además de su producción tangible, su presencia en el hielo también sirve para abrirle espacios a sus compañeros, gracias a que las defensas contrarias suelen concentrar la mayor parte de su atención en él.
"Definitivamente sentimos que las oportunidades se nos han ido abriendo más últimamente", dijo O'Connor, cuyo gol fue en desventaja numérica. "Así que creo que sólo estaba intentando meter el disco, enfocarme un poco más".
Ahora, el reto del Avalanche será mantener el ritmo y esperar que el resto de las incorporaciones sigan haciendo efecto, para poder retomar rápido la etiqueta de favorito al título.
Luego de un par de días de descanso, Colorado regresará a la acción el martes para recibir a Tampa Bay, en lo que será una revancha del blanqueo de hace unos días. A las 24 horas, se medirán, como visitantes, al Wild.