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Las posibilidades de los Blues de avanzar a la postemporada son mínimas. El margen de error para St. Louis es prácticamente inexistente. Sin embargo, los resultados del miércoles dejaron con vida las esperanzas de la tropa de Drew Bannister.

Los Blues vencieron a los Blackhawks 5-2 en el Enterprise Center de St. Louis para mejorar su récord en el año a 42-32-5, 89 puntos, para colocarse a tres unidades de los vigentes campeones de la Stanley Cup Golden Knights, que tropezaron por tercera ocasión consecutiva, en la puja por el segundo Comodín de la Conferencia del Oeste.

Los Blues entienden muy bien el reto que tienen por delante en sus últimos tres compromisos de la campaña, si quieren encontrar la manera de ingresar a la fiesta de los Playoffs de la Stanley Cup, pautados para iniciar el 20 de abril.

Y vaya que lo demostraron en el hielo, con el mejor inicio de cualquier equipo en esta temporada.

Los Blues anotaron sus primeros cuatro goles en los 6:59 minutos iniciales del compromiso, representando los cuatro tantos que más rápido se anotan en el año. Además, se convirtieron en el segundo equipo desde la campaña 2009-2010 en sumar cuatro goles con los primeros cuatro disparos de un juego — los Canucks habían sido los últimos en lograrlo (6 de mayo del 2021).

Los Blues atacaron primero al portero Petr Mrazek (tres goles con tres disparos) y luego hicieron lo propio frente a Arvid Soderblom, alcanzando las redes con el primer disparo ante él. De esta manera, el club continuó su dominio ante un conjunto de Chicago ante el que suman marca de 13-2-2 en sus últimos 17 enfrentamientos.

“Obviamente, tuvimos un gran comienzo de partido y nos vimos recompensados. Inclinamos la balanza a nuestro favor bien rápido”, expresó el entrenador interino de los Blues, Drew Bannister. “Fue bueno ver a nuestros chicos salir con ese sentido de urgencia desde el inicio”.

Los autores de esos primeros cuatro tantos fueron Jordan Kyrou (los dos primeros), Torey Krug y Zack Bolduc. En el segundo período, Philipp Kurashev descontó para los Blackhawks, mientras que en el último tramo, ambas partes dividieron goles, con Robert Thomas anotando por los locales y Landon Slaggert por los visitantes.

CHI@STL: Kurashev hunde el rebote

“Fue bien rápido”, describió Bolduc. “No sabía. Alguien me dijo sobre los cuatro goles con cuatro disparos después del juego. Sí, tuvimos un gran comienzo, pero creo que nos descuidamos un poco en el segundo [período]. Luego retomamos la forma en el tercero”.

Kyrou (2-0—2) continuó así con su buen momento, alcanzando siete puntos (4-3) durante una racha activa de cuatro juegos con al menos un punto. De su parte, Bolduc (1-1—2) consiguió su primera jornada de múltiples puntos con el uniforme de los Blues. Ellos fueron parte de un grupo de cuatro Blues con dos unidades ante Chicago. En la portería, Joel Hofer detuvo 18 de los 20 disparos que enfrentó, incluyendo un perfecto de 3-3 en situación de desventaja numérica.

“Sí, se siente bien”, señaló Kyrou. “Obviamente, no puedes controlar lo que pasa con los otros equipos, pero sí puedes controlar lo que haces, ¿no? Ese debe ser nuestro único enfoque ahora mismo”.

Los Blues tienen tres partidos restantes en la temporada, en los que enfrentarán a dos de los mejores equipos de la NHL, Carolina y Dallas.

El viernes recibirán a los Hurricanes, el domingo harán lo propio ante el Kraken y después cerrarán su temporada regular el miércoles visitando a los Stars. Mientras tanto, los Golden Knights tendrán sus últimos cuatro encuentros en casa, en donde recibirán al Wild, Avalanche, Blackhawks y Ducks.

Y además de verse obligados a remontar una desventaja de tres puntos en ese tres compromisos, el hecho de haber disputado un partido más que Vegas le agrega un mayor grado de complejidad a su intento de escabullirse a los playoffs.

Dicho eso, hay precedente para lo que están intentando en St. Louis. Cinco equipos en la historia de la NHL han logrado remontar un déficit de tres o más puntos en sus últimas tres jornadas de la campaña para lograr clasificar a la postemporada: los Islanders de 2006-07 y 1989-90, los Devils de 1987-88, los Maple Leafs de 1958-59 y los Piratas de Pittsburgh de 1925-26.

Además, de lograr volver a los playoffs tras ausentarse por primera vez primera vez en cinco años en el 2023, podría darles un impulso especial a St. Louis, para intentar reeditar lo hecho en la edición pasada por los Panthers, que llegaron hasta la Final de la Stanley Cup luego de ser el último clasificado de la NHL, consiguiendo el boleto en el penúltimo día de la temporada regular. Pero antes de pensar en eso, primero deben asegurar ese ansiado boleto.