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Empezó la era de Connor Bedard en Chicago.

Uno de los prospectos más cotizados del deporte de los últimos años, inició con el pie derecho su carrera en la NHL, siendo parte importante de la victoria 4-2 ante los Penguins en el PPG Paints Arena de Pittsburgh en el día inaugural de la campaña 2023-24.

Bedard, considerado por muchos como la próxima gran figura de la NHL, tuvo su primera experiencia en un hielo de la NHL ante quien fuera el héroe de su infancia, Sidney Crosby, quien sigue jugando a un alto nivel aun a sus 36 años — algo que demostró el martes con su primer gol de la temporada.
Para la primera selección del Draft del 2023, su debut en la NHL fue un sueño hecho realidad. Pero el hecho de haberlo hecho ante Crosby y los Penguins hizo del momento un más especial.

"Obviamente, es un momento en el que piensas toda tu vida, y ahora es parte del pasado, así de rápido", expresó Bedard tras el juego. "Esa parte es triste".
Claro, el esperado duelo entre Crosby y Bedard no fue casualidad. Fue planificado por la liga para que fuera parte de la jornada inaugural de la liga. La idea era representar el pasar de la antorcha de un jugador generacional como Crosby al siguiente, como Bedard.
"Había un interés real en ver a Connor Bedard en la primera noche de la temporada enfrentarse a Sidney Crosby", señaló Bill Daly, Comisionado Adjunto de la NHL.

CHI@PIT: Donato anora, Bedard logra 1er punto

Y qué mejor manera que ver a Bedard siendo parte de una remontada. Los Penguins, quienes llegan motivados este año a dejar atrás su primera campaña sin postemporada en 16 años, picaron adelante rápido en el marcador. Primero, con un gol de Bryan Rust en el primer período y luego otro tanto de Crosby en el segundo.

Menos de cinco minutos después empezó la reacción de los visitantes, con el primer tanto del año para los Blackhawks, a manos de Ryan Donato y asistido por Alex Vlasic y Bedard. Sin embargo, fue en el tercer tramo cuando la ofensiva de Chicago se destapó, al anotar tres goles consecutivos para sentenciar a los Penguins — de Cole Guttman, Jason Dickinson y Nick Foligno, respectivamente.

"Trabajamos todo el partido", dijo Luke Richardson, entrenador de unos Blackhawks que vienen de la segunda campaña con más derrotas en su historia (49). "Creo que tuvimos grandes ocasiones de gol en los tres períodos. ... Tuvimos una ejecución clave en el tercero, sobre todo. Creo que jugamos excelente después de eso. Jugamos simple y rápido ".

Chicago lució bien en su primer partido de la temporada, sin embargo, resulta difícil alejar el enfoque de Bedard, quien representa la esperanza del futuro de los Blackhawks, siendo a la vez uno de los prospectos más cotizados del deporte desde que el propio Crosby y Connor McDavid debutaron en la liga.
"No parecía un chico joven tratando de encontrar el juego", señaló Dickinson. "Controlaba el disco muy bien. Estaba haciendo jugadas. Obviamente, esta noche ha dado una asistencia, así que creo que tiene muy buena pinta".

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Con esa asistencia, Bedard (de 18 años y 85 días) hizo historia por primera vez en su carrera, al convertirse en el quinto jugador activo más joven de la liga en registrar un punto en su debut en la NHL, ubicándose por detrás de Aleksander Barkov (18 años, 31 días en 2013), Nathan MacKinnon (18 años, 31 días en 2013), Sidney Crosby (18 años, 59 días en 2005) y Evander Kane (18 años, 62 días en 2009).

Además, Bedard encabezó al club en disparos a gol (5) y a todos los jugadores en el hielo en intento de remates (11).

"Fui el menos importante en el gol, pero obviamente se siente bien conseguir uno ahí", dijo Bedard, restándole importancia al pase de gol. "Creo que siempre tengo confianza en mí mismo. Va a haber partidos difíciles. Obviamente son los mejores jugadores del mundo, la mejor liga del mundo. Creo que, para mí, se trata simplemente de intentar mejorar en cada oportunidad, en cada partido."

Del otro lado del hielo estuvieron también Evgeni Malkin, Crosby y Kris Letang, quienes hicieron también historia el miércoles, al iniciar su 18va campaña consecutiva como compañeros, rompiendo un empate con Derek Jeter, Mariano Rivera y Jorge Posada — que compartieron camiseta durante 17 años en fila en las Grandes Ligas con los Yankees — para convertirse en el trío que más tiempo han estado junto en un mismo club en los deportes profesionales de Norteamérica.

En otras palabras, el trío de los Penguins ha estado junto durante toda la vida de Bedard. De allí el significado más allá del juego del encuentro entre los Penguins y Bedard. Fue la representación deportiva del inicio de la carrera de la posible cara de la nueva generación de la NHL.

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