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Desde su fundación oficial en 1917, La National Hockey League se ha convertido en una de las cinco ligas más grandes del deporte profesional en América del Norte y con el pasar de cada temporada, nuevos mercados se suman a la afición, al tiempo en el que son más los jóvenes que se agregan a la práctica de esta disciplina. Por ello, NHL.com/es, presenta las conexiones existentes entre el hielo y personalidades fuera de la pista y esta entrega, destaca la perspectiva de algunos embajadores cubanos en el Béisbol de Grandes Ligas.

Desde 2020, quizás no haya una figura deportiva más popular en el área de Tampa Bay, que el cubano Randy Arozarena, mucho más después del retiro del Mariscal de Campo de los Buccaneers en la NFL, Tom Brady. Y es que el antillano, fue el Jugador Más Valioso de la Serie por el Campeonato de la Liga Americana en el Béisbol de Grandes Ligas hace cuatro años, lo que marcó el inicio de una de las mejores carreras recientemente para un pelotero de los Rays.

Arozarena pasó de ser un jugador complementario a una estrella consagrada con el equipo de Florida, ocupando los primeros puestos en carreras impulsadas, hits y especialmente, siendo clave durante los playoffs. Sus crecimiento lo llevaron a ser escogido al All Stars Game en 2023, año en el que el antillano extendió su popularidad al defender la camiseta de México en el Clásico Mundial de Beisbol.

“México me recibió un hijo cuando me escapé de Cuba en 2015. Por eso fue que le pedí a la afición y al Presidente que me permitieran ser ciudadano mexicano para representar al país en el Clásico Mundial de Béisbol. Hoy tengo esta posibilidad, esta oportunidad y me siento agradecido”, declaró Arozarena a la cadena ESPN durante la pasada cita internacional.

Hockey: Una nueva experiencia

La primera temporada del cubano en Tampa Bay, coincidió con la celebración del segundo título del Lightning en la NHL, al imponerse en seis cotejos sobre los Dallas en Final de la Stanley Cup que se disputó en la llamada “Burbuja” creada tanto en Toronto, sede de los playoffs de la Conferencia Este, como en Edmonton sede del Oeste y serie por el campeonato de la NHL, debido a la pandemia del COVID-19.

Desde la distancia, Arozarena fue cautivado por un éxito del Lightning que se hizo más fuerte en 2021, cuando el equipo tuvo la oportunidad de celebrar en casa el segundo campeonato consecutivo (tercero en la historia), tras vencer en cinco encuentros a los Montreal Canadiens.

“Mi gente, me encanta el hockey”. Dijo el caribeño a NHL.com. “La verdad que uno se la pasa muy bien porque esos juegos son muy emocionantes, hay una gran velocidad debido a la energía y bueno de vez en cuando hay algunas peleas, pero eso no le quita la diversión, por eso cuando tengan la oportunidad de ir, háganlo porque la van a pasar bien”.

La conexión entre Rays y Lightning ha estado presente desde la llegada de Arozarena a la ciudad de Tampa Bay. Así quedó demostrado en las redes sociales por el capitán del equipo el equipo de hockey a nivel local, Steven Stamkos, quien desde 2020 ha dejado claro su apoyo.

JD Martínez: Directa relación

Durante 13 años en el béisbol de Grandes Ligas, Martínez se ha consagrado como un bateador de poder gracias a temporadas de más de 100 carreras impulsadas para superar las mil de por vida, en combinación a selecciones al Juego de Estrellas, más de 300 cuadrangulares y un título de Serie Mundial con los Boston Red Sox en 2018.

El cubanoamericano creció en Florida, en medio de una formación completamente hispana que le creo el hábito de siempre apoyar el talento local, bien sea de su estado natal o de la tierra de sus padres. Es por ello que, a pesar de nunca haber jugado con ninguno de los equipos de la llamada “Capital del Sol”, Martínez es un fiel admirador de los Panthers, pero también de los Red Wings, debido a sus cuatro años en Detroit.

“Hace algunos años me hice amigo con algunos de los jugadores. Pude conocer a Barkov, Huberdeau cuando estaba en Florida y otros. Ya sabes cómo eso funciona, cuando salíamos a comer, ellos mismos me explicaron el juego y tengo que decir que me convirtieron en un aficionado”.

Un sentimiento que Martínez explica que se incrementó al momento de presenciar los encuentros en el hielo. “Los muchachos me animaron a ir a los juegos, entonces empecé a ir y fue cuando me di cuenta de toda la acción, el contacto. De verdad que en los últimos dos o tres años, me he convertido en un fanático del hockey”.

Y por encima de las conexiones, estrellas cubanas como el caso de Andy Ibáñez, también destacan los esfuerzos de la NHL, para reconocer la presencia de la afición hispana. “Creo que es una iniciativa excelente y espero que las demás celebraciones sean igual de excelentes a la más reciente, muchas bendiciones”.

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