Los 11 triunfos consecutivos han ayudado a los Oilers a ubicarse entre los primeros 10 equipos en varios departamentos de la NHL, como el de la menor cantidad de goles recibidos (octavos) y porcentaje de efectividad en Power Plays (octavos), pero hay dos renglones que llaman la atención; son quintos en remontadas y sextos en cantidad de victorias cuando no anotan el primer tanto de los compromisos.
"Absolutamente. No es fácil remontar, sobre todo contra un buen equipo como los Maple Leafs. Pero ya lo he dicho muchas veces: no nos frustramos y nos apegamos al plan de juego”, mencionó el entrenador Kris Knoblauch. “No tenemos que alterar nada drásticamente. Sólo tenemos que trabajar duro y hacer las jugadas pequeñas”.
Pero más allá de las reacciones, hay otros motivos por los cuales los Oilers han logrado imponer un nuevo récord para el club con sus victorias consecutivas. La profundidad de su roster ha sido un factor importante, algo que también quedó en evidencia ante los Maple Leafs.
El tanto de McLeod mejoró sus números personales a 11 puntos (seis goles, cinco asistencias), liderando a todos los jugadores de Edmonton con tres goles del triunfo, durante la seguidilla de 11 triunfos — el único jugador con más tantos de ese estilo durante una seguidilla en la historia del club es Jari Kurri, quien anotó cuatro durante una racha en 1984-89.
Mientras tanto, en la portería Stuart Skinner tuvo otro gran juego, deteniendo 25 disparos para extender su propia racha de triunfos a ocho y mejorar su récord en la temporada a 19-9-1, con un GAA (promedio de goles en contra) de 2.61 y un porcentaje de salvadas de .903 — quinto en triunfos y 11mo en GAA en la NHL. De su parte, además de McLeod (1-1—2), Bouchard (1-1—2) fue el otro jugador de los Oilers en registrar múltiples puntos ante Toronto.
Claro, eso no quiere decir que los sospechosos habituales hayan estado apagados últimamente. Draisaitl anotó su 21er gol de la temporada y McDavid asistió el gol del triunfo, para extender a 11 su seguidilla de puntos, en la que suma 17 unidades producto a cinco goles y 12 pases de gol.
"Ganar se siente muy bien siempre, pero hemos trabajado muy duro para remontar [en la tabla] y de ninguna manera vamos a soltar el acelerador", dijo Draisaitl. "Eso es algo de lo que tenemos que ser conscientes, y creo que esta noche lo hemos vuelto a hacer muy bien. Aún no hemos llegado a la mitad de la temporada, así que queda mucho hockey por jugar".
Los Oilers mejoraron su récord en el año a 24-15-1 (49 puntos) y despiertan el miércoles como el primer Comodín de la Conferencia Oeste, aunque se ubican a un solo punto de los Kings por tercer lugar de la División del Pacífico y a seis de los Golden Knights por la segunda casilla.
Con el objetivo puesto ahora en esos puestos directos de clasificación en su división, Edmonton recibirá el jueves al Kraken para prolongar su buen momento.
