Brillante esfuerzo de Oilers no fue suficiente

Al final, los Edmonton Oilers se quedaron dolorosamente cortos.

El conjunto canadiense inició la Final de la Stanley Cup abajo 3-0 ante los Florida Panthers. Pero con sus espaldas contra la pared, lograron forjar una dominante racha de tres partidos para empatar la serie 3-3 y forzar un Juego 7.

Pero al parecer, a Edmonton se le acabó el combustible en la última parada. Sin la garra y enjundia que mostraron para revivir en la serie, fueron contenidos por los Panthers. Cargaron con una derrota de 2-1 y vieron desvanecerse la oportunidad de lograr la hazaña y unirse a los Toronto Maple Leafs como los únicos equipos en la historia de la NHL en ganar el título después de perder los primeros tres duelos.

El capitán de los Oilers, Connor McDavid, fue franco al expresar su decepción por el resultado. “Esto apesta”, indicó. “Sabías que iba a estar reñido, el séptimo juego por la Copa. Sabías que iba a ser un juego muy apretado y que se iba a decidir por una cosa u otra. Estuvimos a un paso de ponernos 2-1 justo antes de que ellos se pusieran 2-1. Es difícil. Hacen un buen trabajo cerrando las cosas. Tuvimos nuestras oportunidades, simplemente no lo conseguimos. Sólo la resiliencia. La resiliencia del grupo. Como dijiste, pasamos por mucho. Altibajos, y estuvimos así de cerca”.

McDavid tuvo unos Playoffs espectaculares en lo individual, lo que le valió llevarse el Conn Smythe Trophy, el premio para el jugador más valioso de la postemporada. Terminó como el líder en puntos con 42 (ocho goles y 34 asistencias) en 25 partidos. Ayudó a Edmonton a meterse en la Final de la Stanley Cup con actuaciones de cuatro unidades en los Juegos 4 y 5.

Pero en el crucial Juego 7 contra Florida, el capitán se fue en blanco, así como la otra gran figura ofensiva de los Oilers, Leon Draisaitl. El alemán terminó como el tercer jugador con mas puntos en los Playoffs con 31 unidades (10 goles y 21 asistencias) en 25 cotejos. Sin embargo, en la final pasó casi desapercibido al registrar solo tres asistencias en toda la serie.

“Simplemente no pudimos encontrar el segundo gol”, contó Draisaitl sobre la derrota. “Creamos suficientes oportunidades para encontrar otro, pero obviamente, no estaba destinado a ser”. Pese a que no lograron coronarse, Draisaitl destacó el trabajo y la reacción de sus compañeros en la serie.

“Es un grupo increíble, un grupo increíble de muchachos. Tienen mucho carácter. Es difícil expresar con palabras cuánto carácter hay en este grupo”, señaló. “Estoy muy, muy, muy orgulloso de que nos mantuvimos firmes todo el año. Sí, luchamos hasta el final”.

Y como lo hizo todos los Playoffs, el alemán no se guardó palabras para elogiar el desempeño de su gran amigo, McDavid. “Es el mejor jugador del mundo, en mi opinión”, exclamó. “Hace muchas cosas que mucha gente no ve. Su ética de trabajo, él solo prácticamente cambió nuestra franquicia. Me encanta compartir el hielo con él. Es una persona realmente, realmente especial”.

Edmonton tuvo sus oportunidades a lo largo de 60 minutos de juego. Produjo más tiros a gol que Florida (24 a 21) y cerró los últimos cinco minutos del partido apedreando la portería de Sergei Bobrovsky, quien volvió a la inmensa forma que tuvo en los primeros tres choques de la serie. No obstante, no pudieron tener la contundencia que los llevó a superar 18 a 5 en goles a Florida en los Juegos 4, 5 y 6.

“Obviamente no es donde quieres estar. Estás a una victoria, a un período, a un gol. Los detalles son tan mínimos en este negocio. Tuvimos nuestras oportunidades en el tercero. Obviamente, ellos defendieron bien”, comentó el defensa, Mattias Ekholm, quien ya está pensando en el año que viene. “Solo mira el panorama general, por lo que hemos pasado, los pasos que ha dado este grupo, el nivel de madurez, la competencia que mostramos en los Playoffs, especialmente. Tendremos a la mayoría del grupo de vuelta el próximo año. Ojalá esto sea un gran paso para que el grupo finalmente lo logre el próximo año. Ahorita apesta, pero al final del día, así es como tienes que verlo”.

Draisaitl, por su parte, reconoció que dejaron escapar una oportunidad de oro y será bastante complicado volver a estar a un paso de la copa. “Es difícil ponerlo en palabras ahora mismo”, dijo. “Es realmente, realmente difícil. Estás a un período, a un tiro de tal vez ganar. Ahora tienes que pasar por 82 juegos de temporada regular otra vez y jugar lo suficientemente bien como para tener otra oportunidad. Es difícil en este momento”.