McDavid deslumbró y arrasó en la Prueba de Habilidades

Los astros se alinearon a la perfección para Connor McDavid, la gran estrella de los Edmonton Oilers la noche del viernes cuando tuvo lugar la competencia de habilidades (All-Star Skills) en la Scotiabank Arena en la víspera del Juego de Estrellas de la NHL, un evento en el que tuvo bastante que ver la opinión del ‘97’ de Edmonton.

Después del fin de semana de las estrellas de 2023 y tras recabar los sentimientos de jugadores, ejecutivos y aficionados, el comisionado Gary Bettman sabía que era momento de darle un vuelco al concurso de habilidades y para afrontar esa tarea echó mano de la sabiduría y sensibilidad de quien podría considerarse como la cara de la NHL, McDavid.

Después de varias reuniones con funcionarios de la liga escuchando lo que McDavid tenía que decir, además de algunas otras estrellas que se sumaron a estas conversaciones, la decisión fue darle un giro al All-Star Skills y retomar un poco de lo que en el pasado hacía atractivo el evento y el resultado resultó ser muy positivo.

“Creo que las competencias anteriores del Juego de Estrellas fueron un poco extravagantes”, dijo McDavid. “Pero estoy entusiasmado de que sean habilidades normales las que usaríamos en el hielo. En última instancia, eso es lo que queremos, venir aquí y mostrar nuestras habilidades y ofrecer un buen espectáculo a los aficionados”.

McDavid deslumbró al ganar la contienda del patinador más rápido de la NHL, se fue perfecto (4 de 4) en el concurso de tiro de precisión, después fue el mejor en la prueba de habilidad con el bastón y cerró con broche de oro al arrasar en la carrera de obstáculos para proclamarse como el mejor del viernes y, además, embolsarse un millón de dólares.

“Pienso que estuvo muy entretenido”, comentó McDavid. “Desde el punto de vista competitivo, definitivamente se volvió competitivo. Estaba jalando aire y resoplando. Los chicos estaban trabajando duro, tratando de dar un buen espectáculo, y siento que lo hicimos y puedo sentirme bien por ello. En última instancia, depende de los aficionados y espero que lo hayan disfrutado”.

Una de las cosas que fueron añadidas a este fin de semana de las estrellas o que trajeron de vuelta fue el draft de jugadores con la presencia de celebridades como Justin Bieber o Michael Bublé, para abonar a ese intento de darle un giro a algunas de las festividades.

Este formato de 12 jugadores compitiendo y puntuando después de cada prueba con una bolsa de un millón definitivamente reanimó el concurso de habilidades, pero eso es al margen del reconocimiento que otros grandes jugadores hicieron sobre el desempeño de McDavid.

“Obviamente él es el epítome de la competitividad en el día a día, así que no me sorprende”, comentó su compañero de equipo en los Oilers, Leon Draisaitl. “Lo he visto hacerlo por años, es lo que hace todos los días de juego y eso es lo que lo hace impresionante, ¿verdad? Somos muy afortunados de verlo trabajar todos los días, es tan competitivo y atento a los detalles”.

Nacido en Richmond Hill, Ontario, a unos 40 kilómetros al norte de Toronto, McDavid estaba jugando en casa, creció como aficionados a los Maple Leafs, aunque profesionalmente se debe al equipo de Edmonton.

“Los aficionados de Toronto siempre me han demostrado su cariño cuando he estado de regreso aquí y eso significa mucho para mí”, comentó el astro de los Oilers. “Esta arena significa mucho. Los aficionados siempre me han tratado muy bien y es muy especial escucharlos aplaudir y gritar”.

Uno de los pocos que pudo hacerle frente a McDavid, si no es que lo superó, fue el portero del Colorado Avalanche, Alexandar Georgiev, quien registró nueve salvadas ante el astro de los Oilers en la prueba de uno contra uno, lo cual le hizo acreedor a un cheque de la nada despreciable suma de 100 mil dólares.

“Fue una prueba muy entretenida. Me gusta enfrentarme a Connor. Lo felicito, es impresionante y muy divertido de ver”, comentó el búlgaro.

El delantero de los Vancouver Canucks Elias Pettersson ganó el reto de los pases con 25 puntos, en tanto que el defensa del Avalanche, Cale Makar, se adueñó del concurso del tiro más potente, con un tiro que tuvo una velocidad de 165 kilómetros por hora (102.5 millas).

“La verdad me sorprendió un poco, para serles honesto”, dijo Makar sobre ganar esa prueba. “No sé si alguna vez he disparado un puck a más de 100 millas por hora (160 kilómetros). Creo que no me enfoco en tirar tan duro como puedo, pero huno algunos compañeros en el equipo que me dijeron que debería intentarlo”.

Aunque se quedó corto en el intento de desafiar a McDavid, no hubo aplausos más fuertes la noche del viernes en la Scotiabank Arena que los que le brindaron al delantero de sangre mexicana de los Maple Leafs, Auston Matthews, quien ilusionó a la afición local con buenos desempeños en las pruebas de uno contra uno y en la carrera de obstáculos, pero la diversión y los recuerdos son imborrables.

“Se sintió competitivo en el hielo, en su mayor parte así fue”, comentó Matthews. “Pienso que estuvo bueno, especialmente cuando estás llegando a los últimos dos eventos y ves dónde estás en la clasificación, definitivamente fue un poco de motivación extra para colarme en esa segunda ronda y luego cualquier cosa podría haber pasado”.

Y añadió: “Creo que fue genial. Este fue el primer año haciendo este formato. Nunca será perfecto, pero pienso que es una buena base para el futuro y seguir teniendo competencias de habilidades en un formato similar a este”.