Emotivo debut Cubano-estadounidenses en la LATAM Cup

A pesar de resultados adversos, Earle Barrington dijo que no podría haber estado más orgulloso de su equipo masculino cubano-estadounidense de la División III de la Amerigol Latam Cup 2024.

“Lloré en el vestidor de la felicidad que sentí”, dijo Barrington, entrenador y fundador de los equipos masculinos de División I y División III que compiten en el torneo. “Hay jugadores que llegaron en botes y que nacieron en Cuba. Aunque nuestro equipo de nivel III está siendo derrotado, están jugando. Fue muy emotivo”.

Los equipos cubano-estadounidenses hicieron su presentación en la LATAM Cup después de que Barrington miró a otros equipos jugar mientras vendía mercancía de hockey durante el torneo en el Florida Panthers IceDen.

“Siempre quise formar un equipo cubano, porque el torneo es simplemente increíble”, dijo Barrington, cuyo hijo, el defensa Max Barrington, jugará en el equipo de la División I. “Vivimos en la tierra de los cubanos, aquí en el sur de Florida. Como todos los demás, los cubanos también juegan hockey”.

La LATAM Cup de este año incluyó la participación de 52 equipos tanto de mujeres como de hombres y de categorías juveniles, con un poco más de 1,100 jugadores representando a 17 diferentes países como Argentina, Armenia, Brasil, Chile, Colombia, Egipto, Grecia, Israel, Líbano, México, Puerto Rico y Venezuela.

Barrington, quien se desempeña como defensa del equipo Panthers Warrior, comenzó a hacer reclutamiento el año pasado y se presentó con 179 jugadores ansiosos de representar su herencia y anterior patria.

“Contamos con cuatro jugadores que nacieron en Cuba, pero todos son estadounidenses y aman a Estados Unidos”, dijo. “Pero solo el sabor cubano, el espíritu del equipo. Entiendo que cada equipo se siente conectado debido a la herencia de sus países... pero debido a lo que ellos mismos o sus padres o abuelos han pasado para estar aquí, es una unión diferente, estamos juntos”.

Eso es lo que motivó al delantero Chris Galante a jugar para el equipo masculino de la División I, que tiene un récord de 2-1-0 después de perder el viernes por 5-2 ante Grecia.

“Nací y crecí aquí y estoy orgulloso de ser estadounidense, pero mis raíces son obviamente de la cultura cubana”, dijo Galante. “Hemos jugado hockey de élite durante muchos años y creo que es hora de que salgamos y demostremos lo que tenemos”.

Alejandro Ortiz dijo que nunca pensó que tendría la oportunidad de jugar en un equipo con compatriotas cubano-estadounidenses.

“Ser parte de algo que no es una liga casual es significativo”, comentó Ortiz. “Es significativo cuando anotas. No se trata solo de ‘voy a jugar al hockey, pasar el rato con los muchachos y tomar una cerveza después’. Esta vez hay un poco más que eso y significa mucho para mí”.

También significa mucho para Randy Hernández, quien le está dando una mano a Barrington para entrenar en la LATAM Cup.

El delantero de 25 años es una de las historias de éxito latinas del sur de Florida.

Hijo de inmigrantes cubanos, ha jugado ya dos temporadas en el Programa de Desarrollo de la Federación de Hockey de Estados Unidos (USA Hockey National Team Development Program, de 2015 a 2017), otras dos para los equipos de Sioux City y Lincoln de la United States Hockey League (USHL, de 2017 a 2019), dos temporadas para el club Brooks de la Alberta Junior Hockey League (2018-2020), y otras cuatro para el programa de División I de la NCAA en la Universidad Robert Morris y en Canisius University (2020-2024).

Comenzará su carrera profesional con el equipo de Fort Wayne de la East Coast Hockey League (ECHL) para esta temporada.

“Es una locura pensar que ahora tenemos un equipo cubanoamericano y que vamos a jugar contra tantos otros países”, dijo Hernández. “Es increíble lo que tenemos aquí, un gran grupo de chicos. Es genial poder hacer esto”.