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Después de las victorias, previamente registradas en el día por parte de los Washington Capitals y Philadelphia Flyers, además del punto que sumaron los New York Islanders, el escenario para los Detroit Red Wings era muy sencillo: perder en tiempo regular y despedirse de la posibilidad de seguir en la pelea por un boleto a los playoffs.

Con eso en mente, los Red Wings tenían poco margen de maniobra, al visitar a los Toronto Maple Leafs en la Scotiabank Arena, sabían que solo valía ganar para seguir albergando esperanzas en los dos juegos restantes del rol regular.

Gracias a un gol de su capitán Dylan Larkin en el tiempo extra, los Red Wings vencieron 5-4 a los Maple Leafs, no sin antes sufrir lo indecible, después de ver cómo se les diluyó una ventaja de tres goles para acabar imponiéndose con drama y llegar a los 87 puntos, misma cantidad que tienen los Capitals, equipo que estaría clasificado si la temporada hubiera concluido.

En situación de Power Play, acarreada de los segundos finales del tercer periodo y llevada al tiempo extra, Larkin anotó su gol 33 de la campaña a los 41 segundos de la prórroga, gracias a un pase quemante de Patrick Kane que el capitán desvió a quemarropa frente a Ilya Samsonov para llevarse el punto adicional uno de 24 quilates para Detroit.

“Ese es uno de los goles más importantes de mi carrera y espero que este año tenga otros aún más importantes”, dijo Larkin, quien impuso su máximo total de goles en una campaña el sábado. “No puedes sentirte mejor. Sabía que Kane iba a buscar esa jugada, y solo debía tener mi bastón en el hielo y él iba a mandar el disco. Ni siquiera lo vi entrar. Ver a todos los chicos apresurarse, vaya, qué sensación”.

Larkin anotó el noveno gol de su carrera en tiempo extra, con el cual empató a Brendan Shanahan y a Steve Yzerman en la segunda posición histórica en ese rubro en la franquicia de Detroit. El líder en ese renglón es Sergei Fedorov (12).

DET@TOR: Larkin lo gana en tiempo extra

Larkin disputa su novena campaña en la NHL, todas ellas con Detroit, y solamente ha disputado una vez la postemporada, su año de novato, por lo que la ha tocado vivir en carne propia la sequía de siete temporadas consecutivas de los Red Wings mirando los playoffs desde el televisor.

“Hemos estado ‘peleando por nuestras vidas’ y el sacrificio, la actitud de los muchachos ha sido increíble y esta noche fuimos recompensados por todo el arduo trabajo que hicimos en el último tramo aquí donde no habíamos sido recompensados”, agregó Larkin.

Después de que Mitchell Marner abrió el marcador a los 8:35, en Power Play, para Toronto, siguieron cuatro goles sin respuesta de los Red Wings, por parte de Alex DeBrincat, Simon Edvinsson, otra vez DeBrincat y de David Perron, todos en el primer periodo para que Detroit abriera la brecha a 4-1.

Reacción de los Maple Leafs y gol 69 de Matthews

Sin embargo, los papeles se invirtieron y el dominio del juego se pasó a la banca de Toronto, pues los Maple Leafs anotaron tres goles sin contestación en el segundo periodo para poner el juego más que interesante.

A los 9:04 Nicholas Robertson recortó la distancia a 4-2. Y después llegó el momento que muchos estaban esperando: que Auston Matthews encendiera la lámpara.

El delantero de sangre mexicana anotó su gol 69 a los 10:23, en situación de ventaja numérica, luego de recibir un pase de Marner al corazón del círculo izquierdo, recibió y en fracciones de segundo jaló del gatillo para superar a James Reimer y acercar a los Maple Leafs, y de paso a la proeza de los 70 goles, una marca que no se alcanza en la NHL desde hace más de tres décadas.

DET@TOR: Matthews anota desde el círculo

“Mi enfoque en cada partido, cada noche, es el mismo”, comentó Matthews. “Simplemente trato de no pensar demasiado”.

Matthews suma 10 goles en los últimos ocho encuentros. Gracias a su gol 69, empató a Mario Lemieux quien en la campaña de 1995-96 se despachó también con 69 anotaciones.

A los 17:22 del segundo, el capitán John Tavares se encargó de emparejar los cartones a 4-4, haciendo que la Scotiabank Arena estallara en júbilo por la proeza de recuperarse a un déficit de tres anotaciones, pero los Red Wings se estaban jugando la vida en este partido.

“Obviamente estábamos jugando contra un equipo muy desesperado, un equipo que está luchando por su vida y que estaban mucho más desesperado que nosotros en el primero y pensé que empezábamos a jugar mejor en el segundo, lo tomamos un turno a la vez y estábamos listos para poder contraatacar”, dijo Matthews.

Tras consumarse la derrota en tiempo extra, los Maple Leafs se quedan atados a la tercera posición dentro de la División Atlántico, con dos juegos en gira restando en su calendario para bajar el telón de la temporada regular.

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