Cumpliendo cinco años de su estancia en Norteamérica, la cual incluyo etapas en la USHL, NCAA y la AHL, Erik Portillo pudo cumplir su meta de debutar en la National Hockey League. El espigado arquero tuvo un partido de ensueño el pasado 29 de noviembre, al guiar a los Kings a un triunfo de 2-1 ante los Ducks en el Honda Center.
En aquel duelo donde salvó 28 disparos y además, Portillo pudo traer sus raíces hispanas al hockey sobre hielo más importante del mundo.
La conexión entre Suecia y España
Erik Portillo nació hace 24 años en Gotemburgo, Suecia, pero desde pequeño estuvo expuesto a sus raíces hispanas y al idioma castellano. Su madre quería que naciera en el país nórdico, sin embargo, su familia regresó poco después a España, donde su padre Andrés había trabajado antes.
Las orígenes ibéricos de Erik se remontan a su abuelo paterno, quien nació en un Ceuta, una pequeña ciudad al sur de España, donde se desempeñó en el ámbito militar y sirvió en el mar durante varios años . Viajando una generación más atrás, el bisabuelo de Erik fue quien impuso la tradición militar en la familia y su bisabuela era nativa de Argentina.
“Desde una temprana edad recuerdo a mi padre y a mi abuelo hablando español”, comentó Portillo. “Además, pasaba mucho tiempo en casa de mi abuela y recuerdo a una vecina suya que era de Colombia”.
Escuchando conversaciones en español en su casa y en sus constantes vacaciones en España, Erik pudo estudiarlo desde el sexto grado hasta que terminó la preparatoria en Suecia. En aquellos tiempos, aprovechó que su madre había aprendido el idioma durante sus años viviendo en el país ibérico y pudo apoyarlo bastante con sus tareas escolares.
Entre los viajes que Portillo recuerda durante su adolescencia, destaca uno en el que su familia se trasladó a Estados Unidos y manejó a lo largo de la costa de California. Mas de una década previa a su debut en Anaheim, el arquero pudo entender la importancia de ser políglota en una de las regiones más multiculturales del mundo.
“El dominar el idioma te da una conexión más personal con la gente”, declaró Portillo. “Como mi padre hablaba español perfecto, la gente le daba buenas recomendaciones sobre hoteles y restaurantes, emocionados de escucharlo hablar su lengua”.
Rumbo al profesionalismo en California
Después del éxito obtenido en selecciones juveniles en Suecia, Erik Portillo pudo emigrar a los Estados Unidos persiguiendo su sueño, al ser reclutado por los Buffalo Sabres en el draft de la NHL del 2019. El guardameta inicio con el pie derecho a un nuevo país, recibiendo el honor de arquero del año de la USHL, pero no pudo arreglar su contrato profesional con el equipo neoyorquino.
Portillo procedió a jugar tres años en la Universidad de Michigan, donde terminó su carrera colegial con marca de 60-22-3, .918 de porcentaje de salvadas y un promedio de 2.49 goles en contra por partido. Sus grandes actuaciones llamaron la atención en Los Angeles Kings, quienes lo adquirieron en un canje el 2 de marzo del 2023.
Esa fecha fue simbólica para los dos veces campeones de la Stanley Cup, pues justo un día antes habían completado un cambio con Columbus transfiriendo a Jonathan Quick, el portero más importante en la historia de la franquicia. 21 meses después, Portillo finalmente pudo tocar el hielo en un partido de la NHL, subiendo del filial Ontario Reign, para cubrir al lesionado Darcy Kuemper.
“Fue muy emocionante el obtener un buen resultado en mi primer partido”, mencionó Portillo. “Mi meta es encontrar un nivel de consistencia para poder establecerme como un arquero de la NHL”.