Más que un juego
Por encima del aspecto deportivo de lo que ha sido una carrera de casi una década sobre el hielo, Hinostroza celebra el crecimiento del hockey en todas sus categorías, característica que se ve reflejada en la gran cantidad de apellidos hispanos en jugadores que integran programas infantiles y juveniles, en distintas localidades de los Estados Unidos, Canadá y fuera de las fronteras de estas naciones.
“Es un deporte global, sobre el cual se ha hecho un buen trabajo de propagación para crear mayores mecanismos de acceso para que los niños puedan patinar, aprender y unirse a varios equipos. No obstante, pienso que el juego tiene que crecer, existe mucho camino por transitar y pongo como ejemplo mi ciudad natal, Chicago, en la que crecí sin una gran cantidad de pistas, en comparación a campos de fútbol (soccer) y béisbol”.
Y es que para el jugador, parte de facilitar las vías de acceso consiste de crear un sentido de pertenencia en los más jóvenes. “Para muchos chicos, es mucho más real tomar un balón de fútbol o de fútbol americano, una pelota de béisbol, a diferencia de poder conseguir un par de patines de ruedas o de hielo. Eso es importante de entender para poder destinar una mayor cantidad de recursos hacia necesidades específicas como por ejemplo la indumentaria requerida”.
Elemento único
Rick Hinostroza, papá de Vinnie, creció el área de Bucktown, en los alrededores de Chicago, a donde sus padres llegaron proveniente desde Ecuador en la década de 1970, buscando escapar de la ola de violencia vivida en la nación sudamericana en esa época. La familia, consiguió adaptarse, pero siempre mantuvo su esencia hispana dentro del hogar, a través de las diferentes generaciones.
“La pasión. Eso es algo que define el lado hispano de mi familia”. Dijo con orgullo Vinnie Hinostroza, al momento de ser consultado sobre la principal característica que aporta la cultura latinoamericana. “Sea el deporte que sea o incluso en asuntos de la vida diaria, las discusiones y la comunicación siempre es con una emoción distinta, en la que siempre nos compenetramos”.
Fue en ese ambiente en el que Hinostroza aprendió a valorar su herencia y ahora, sueña con ver las gradas de las NHL llenas de los colores hispanos. “Se que hay muchos aficionados llenos de pasión por el hockey, pero es que además del ruido, nuestra cultura es muy familiar, eso se traduce en que cuando nosotros los hispanos apoyamos algo, lo hacemos en unidad y entregados por una misma causa para poder crear recuerdos, creando una atmósfera distinta”.
Hinostroza fue seleccionado en la sexta ronda del Draft de la NHL de 2012, en su momento parecía que la altura de 5’9 pies de altura y 173 libras, serían un problema para poder establecerse en la NHL, pero fue cuando se apoyó tanto en su crianza como en los valores obtenidos de ver a sus padres trabajando horas extras y realizando sacrificios. Todo ello fomentó una fortaleza mental superior a la física, para lograr el objetivo.
“Mis padres no tuvieron la oportunidad que yo tuve al momento de crecer. Es decir, no hay excusa para no entregar lo mejor que tienes dentro de ti. Sales y representas a tu familia, a tu cultura, tus orígenes, todo. Es más que tu propia persona”. A partir de ese momento le ha seguido una carrera de más de 300 encuentros, casi 150 puntos y un compromiso de seguir aportando su granito de arena”.
Conexiones por encima de la pista
Hinostroza brinda un gran poder a los medios de difusión, razón por la que es un ávido defensor de las transmisiones de los partidos de hockey en español. “Por supuesto. Es que para un padre que llega al país e incluso el niño que está creciendo dentro de un hogar hispano, no existe un mejor vínculo que escuchar un juego en tu idioma diario, en el que hablas con tu familia. Por eso pienso que es vital y me encanta saber que se está haciendo en eso varios mercados”.
Una de esas localidades es la ciudad de Las Vegas, casa de los actuales campeones, los Golden Knights, quienes se unen a los Chicago Blackhawks, Nashville Predators, Arizona Coyotes, Dallas Stars, New York Rangers, Anaheim Ducks y Los Angeles Kings, instituciones que bien sea de forma perenne o en partidos selectos, llevan a cabo la misión de propagar el juego para el público hispano.
Y como elemento final en la conexión con los seguidores del hockey, está el aspecto de la representación, pues Hinostroza forma parte de un grupo de atletas como Matt Nieto, Max Pacioretty, Donovan Sebrango y el Jugador Más Valioso de la temporada 2021-22, Auston Matthews, quienes en la actualidad representan los colores de México, Cuba y Ecuador, sólo por mencionar ejemplos de la cultura hispana sobre el hielo.
“Es algo muy especial para mí, estar en esta posición que representa un enorme honor al poder mantenerme en este nivel, honrar los esfuerzos de mi mamá y papá, con todo lo que pueda ofrecer. En adición a ello, mi compromiso con las futuras generaciones ayudando a crear mecanismos de acceso para que los chicos puedan disfrutar de este hermoso deporte”.