“No es fácil. Es un largo camino para, como, llegar a 500”, expresó Malkin, quien alcanzó esa marca en su juego número 1,150 en la liga. “Me alegra haberlo logrado esta noche. Y, como, por fin. Ahora estoy más relajado. Por primera vez quiero decir, probablemente, algo sobre mí mismo: estoy orgulloso de mí mismo”.
Malkin llegó a los 500 cuando puso a Pittsburgh adelante 4-3 a los 3:26 del tercer período. El delantero centro ruso recibió un pase de revés de Crosby desde detrás de la portería y anotó con un disparo de muñeca mientras estaba en el suelo.
Para Crosby fue muy importante poder ayudar a Malkin a alcanzar este hito trascendental.
“Estoy muy feliz por Evgeni. Obviamente, que haya conseguido su gol número 500 y que hayamos conseguido la victoria”, contó Crosby. “Fue un partido loco. Creo que, al inicio de la temporada, tenemos que encontrar formas de aprender de estos momentos. Pero que lo haya logrado de esa manera y que hayamos encontrado la forma de ganar, fue enorme”.
“Quería asistir en el gol 500 de Malkin. En los últimos juegos, estaba buscando la manera. A veces no funciona. Obviamente, no jugamos juntos en la misma línea tan a menudo. Así que, ya fuera en el juego de poder o algo así, esperaba tener la oportunidad de encontrarlo. Funcionó. Él me asistió muy bien en mi gol 500, así que esperaba poder devolverle el favor”.
Malkin, de 38, es el jugador número 48 en la historia de la NHL en alcanzar los 500 goles, y el cuarto activo. Se unió a Alex Ovechkin de los Washington Capitals (853), a Crosby (593) y a Steven Stamkos de los Nashville Predators (555).
"Primero, esos son grandes nombres. Segundo, no está mal para mí”, señaló Malkin. "Estoy tratando de dar lo mejor de mí. Cuando juegas contra Ovechkin, tratas de ser mejor. Igual, como cuando jugamos con Sid, en el mismo equipo. Pero estoy tratando de hacer lo mejor posible. Él probablemente me está observando”.
Además, Malkin es el tercero en la lista de goles de los Penguins de todos los tiempos. Está detrás de Mario Lemieux (690) y Crosby. También es tercero en puntos con 1,307 (Lemieux, 1,723; Crosby, 1,602) y en asistencias con 807 (Lemieux, 1,033; Crosby, 1,009).
“Recuerdo ver a Malkin jugar, y obviamente, él llegó en mi segundo año”, indicó Crosby, “pero estaba esperando pacientemente a que llegara, y esperaba que fuera más pronto que tarde. Tener la oportunidad de verlo antes de eso, sabiendo lo bueno que era, obviamente nunca lo sabes con certeza, pero desde el principio parecía especial.