Los Edmonton Oilers tuvieron un inicio de campaña un tanto decepcionante, especialmente después de haberse quedado a un triunfo de ganar la Stanley Cup en la temporada pasada. Sin embargo, esas inconsistencias parecen estar quedando cada vez más atrás, con el club luciendo de a poco la identidad que los convierte en un contendiente claro este año.
Claro, gran parte de esa identidad recae sobre los hombros del capitán Connor McDavid y de Leon Draisaitl, quienes brillaron el martes para llevar a los Oilers a un importante triunfo en el Canadian Tire Centre, en donde vencieron a los Ottawa Senators 5-2 para sacudirse el blanqueo que recibieron la noche anterior ante Montreal (3-0) y rescatar una gira de tres partidos que inició el sábado con un revés en tiempo extra en Toronto, pero que termina con el pie derecho para volver a casa después de sumar registro de 1-1-1 en esos tres partidos en cuatro días.
McDavid y Draisaitl exhibieron todo su poderío el martes. Y cuando esto ocurre, Edmonton es prácticamente invencible. Ambos terminaron con tres puntos (McDavid: 2 goles y 1 asistencia; Draisaitl: 1 gol y 2 asistencias), liderando una ofensiva que no sólo respondió, sino que impuso condiciones frente a un equipo de Ottawa que llegaba más descansado. McDavid, como suele ser, destacó por su velocidad y precisión, rompiendo la defensa de los Senators en momentos clave, mientras que Draisaitl demostró nuevamente su habilidad para generar juego tanto como goleador como asistidor.
Edmonton se adelantó temprano en el primer periodo con un gol de Ryan Nugent-Hopkins, y desde ahí no miró atrás. Evan Bouchard también tuvo una actuación destacada con tres puntos, incluyendo un gol que arrancó elogios de su capitán.