Quinn Hughes despegó en una temporada de ensueño

Vaya año para Quinn Hughes. Tanto individualmente como colectivamente, el defensor de los Vancouver Canucks encabezó al que quizás haya sido el equipo sorpresa de la temporada 2023-24.

Su gran campaña comenzó en septiembre, cuando fue nombrado capitán oficial del club. Pero los festejos apenas comenzaban.

Luego de perderse siete de las últimas ocho postemporadas, los Canucks no solo regresaron a los Playoffs de la Stanley Cup, sino que lo hicieron registrando una de las mejores campañas en su historia, finalizando con un récord de 50-23-9 y 109 puntos — la tercera mayor cantidad de triunfos y unidades para Vancouver en un año.

Y, naturalmente, Hughes fue una parte importante en ello, liderando a una de las mejores defensas de la NHL, que terminó el año empatada con los Boston Bruins por el quinto mejor registro de goles permitidos por partido (2.70).

Además, el defensor de 24 años alcanzó topes personales en puntos (92), goles (17) y asistencias (75), lo suficiente para liderar a todos los jugadores de su posición en unidades y en asistencias primarias en situaciones de Power Play (17). Registró nueve juegos con al menos tres asistencias, algo que sólo otros dos defensores habían logrado en una campaña: Bobby Orr (cuatro veces) y Ray Bourque (1993-94).

Todo esto lo llevó a conquistar su primer Trofeo James Norris, otorgado al mejor defensor de la temporada.

“Este es un día realmente especial para nuestra organización", expresó Jim Rutherford, presidente de operaciones de hockey del club, cuando Hughes ganó el premio. “Quinn se convierte en el primer defensor en la historia de la franquicia en ganar el Norris. Tuvo una temporada increíble en el hielo y mostró mucha madurez y crecimiento como líder en nuestro equipo de hockey. No podríamos estar más felices por él y su familia”.

Esto es probablemente lo que imaginaron en Vancouver cuando seleccionaron a Hughes en el séptimo lugar del Draft del 2017. Desde entonces, el mayor de los hermanos Hughes — Jack y Luke juegan con los New Jersey Devils — ha mejorado con el pasar de los años, pero la campaña 2023-24 parece haber consolidado su figura como estandarte de un club que está listo para competir. Y eso es algo que ha sorprendido hasta al propio jugador.

“Honestamente, no tengo palabras sobre mi crecimiento, incluso remontándome a los últimos 18 meses,” confesó Hughes. “Mira, en ese momento estábamos perdiendo y era realmente difícil ver cómo otros equipos tenían éxito cuando nosotros no lo hacíamos, pero ahora es surrealista y probablemente aún no lo he asimilado del todo. Fue una gran temporada para mí y para nuestro equipo. Dimos muchos pasos hacia adelante tanto individualmente como en grupo, así que estoy realmente orgulloso del año.”

Al igual que Hughes, el técnico Rick Tocchet fue reconocido al llevarse el Trofeo Jack Adams al mejor entrenador de la campaña, reflejando los pasos positivos que dieron los Canucks en la temporada pasada.

Claro, esa temporada de ensueño llegó a su fin antes de lo esperado, cuando dejaron escapar una ventaja de 3-2 en la segunda ronda de los Playoffs de la Stanley Cup, para eventualmente ser eliminados en siete partidos por los Edmonton Oilers, quienes terminaron coronándose campeones de la Conferencia Oeste.

Pero eso no le resta brillo al proceso de unos Canucks que parecen ir en ascenso. Y con Hughes como punta de lanza, el club buscará seguir evolucionando hacia un equipo capaz de ganar la primera Stanley Cup en la historia del club.

“Ahora que llegamos a los playoffs y tenemos esa motivación, creo que definitivamente hay espacio para crecer. Diría que ese es el siguiente paso”, dijo Hughes.

Sus mejores juegos

Jornadas destacadas de Hughes hay para elegir. Anotar tres puntos (0-3) en el juego inaugural fue definitivamente un augurio de lo que estaba por venir. Dicho esto, el defensor alcanzó su punto más alto unas semanas después, cuando registró cinco unidades (1-4) el 2 de noviembre contra los San José Sharks, en un partido en el que los Canucks marcaron 10 goles. Hughes se convirtió en el segundo defensor en la historia del club en sumar esa cantidad de unidades en un partido (Jeff Brown, 1995).

Cuatro días después, tuvo otra de sus grandes jornadas al aportar cuatro puntos (1-3) frente a los Oilers. También tuvo dos partidos de dos goles cada uno (el 27 de octubre ante los St. Louis Blues y el 2 de abril ante los Vegas Golden Knights). Sin embargo, quizás su partido más eficiente ocurrió el 8 de enero, cuando, enfrentando a los New York Rangers, su equipo dejó un diferencial positivo de +4 cuando él estuvo en el hielo, siendo esa su máxima cantidad en el año.

Al final de todo, que Hughes y Vancouver hayan tenido una temporada de despegue no es casualidad. El defensor es el pilar de un proyecto que promete continuar su evolución. Es por eso que será muy  interesante seguirle los pasos a este grupo en el campeonato 2024-25.