Versatilidad ofensiva guio remontada de Oilers

Después de hilar 16 triunfos consecutivos y empatar la marca de la racha ganadora más larga en la historia de la NHL (y quedarse a una victoria de romperla), los Edmonton Oilers habían mantenido un patrón hasta el lunes después de estar tan cerca de lograr la proeza: la inconsistencia.

En los seis juegos posteriores a empatar el récord de 16 ganados consecutivos de los Penguins de 1992-93, los Oilers alternaron una derrota y un triunfo invariablemente. Y parecía que el equipo iba a continuar con esa tendencia en su partido del lunes ante los Arizona Coyotes, alargando su miseria y extendiendo a 10 juegos seguidos su racha perdedora.

No obstante, el entrenador del equipo, Kris Knoblauch, le dio una sacudida a sus líneas de cara al tercer periodo, lapso que el equipo comenzó abajo 3-2 en el marcador, para acabar anotando cuatro goles en el tercer periodo que encaminaron a los Oilers a una victoria por 6-3 sobre los Coyotes en la Mullett Arena.

A pesar de que los Oilers abrieron el marcador a los 2:12 del primer periodo con el gol 27 de la temporada para Leon Draisaitl, en Power Play, los Coyotes con la anotación de Nick Bjugstad a los 4:15 para igualar los cartones. Mattias Janmark mandó a los visitantes al primer intermedio con ventaja de 2-1 con su gol a los 6:07.

Pero el segundo periodo fue de los Coyotes, quienes en la desesperación de querer salir de la peor racha perdedora de su campaña, se emplearon a fondo y a través del Power Play empataron 2-2 con el tanto 22 de Clayton Keller, a los 2:53, en tanto que Bjugstad con su segundo gol, a los 10:52 del lapso, puso por delante a Arizona 3-2.

Fue ahí cuando el entrenador Knoblauch movió las fichas de su tablero para intentar darle un vuelco al partido, dividiendo la línea de Connor McDavid y Draisaitl, pasando al alemán a jugar con Evander Kane y Ryan McCleod que pronto dio resultados para el equipo visitante.

A los 4:28 del tercer periodo, Kane anotó el 3-3, los Oilers empataron, pisaron el acelerador y nunca volvieron la vista atrás, con el primero de cuatro goles en el lapso final del juego.

“Cuando las cosas no salen como tú quieres o cuando no tenemos nuestro mejor juego, se trata simplemente de mantener la compostura, no entrar en pánico y saber que si aguantamos el tiempo suficiente y ponemos nuestro juego en orden, podremos salir adelante”, comentó Kane. “Este fue un buen ejemplo de cómo hacerlo esta tarde”.

Al gol de Kane le siguieron, las anotaciones de Zach Hyman, a los 4:54 del tercero para el 4-3, a los 6:31 el segundo de Kane, para llegar a 21 en la temporada, mientras que Warren Foegele selló la remontada y el marcador final de 6-3 a los 18:51 para que Edmonton rompiera el patrón de inconsistencia y ganara su segundo consecutivo.

“Los buenos equipos son capaces de acumular largas rachas y los buenos equipos tampoco acumulan largas rachas de derrotas”, declaró el entrenador de los Oilers después del partido. “Obviamente, ganar consecutivamente se siente bien. Sólo queremos aprovechar eso”.

Junto con Draisaitl, Hyman y McDavid, Kane se convirtió en el cuarto anotador de los Oilers esta campaña en superar la marca de los 20 goles, además, en siete partidos en el mes de febrero suma un total de siete anotaciones.

Después de verse superados no solo en el marcador sino en la posesión y presencia territorial por los Coyotes en el segundo periodo, incluso 9-7 en lo que a tiros a gol se refiere, pero los Oilers corrigieron, ajustaron y además de superar 12-9 a Arizona en remates a portería, los cuatro goles sin contestación fueron algo para lo cual los locales no tuvieron antídoto.

“Estuvimos un poco lentos en el segundo periodo y pasamos demasiado tiempo en nuestra propia zona defensiva”, agregó Kane. “Hicimos un gran trabajo presionándolos un poco más rápido y eso nos llevó a tener algunas oportunidades para anotar”.

Con el gol de Foegele que puso cifras definitivas de 6-3, con la portería vacía, y luego de aportar la asistencia secundaria, Draisaitl se apuntó el partido de tres puntos número 87 de su carrera, rebasando a Paul Coffey en el sexto lugar de los Oilers con encuentros de tal cantidad de unidades.

En el vestidor de los Coyotes el ánimo está por el suelo y no es para menos. Desde que derrotaron 5-2 a los Penguins el 22 de enero, Arizona solamente ha apilado derrotas en su camino. Cuando parecía que iban a salir de ese tobogán adverso en el que se habían metido, vino la reacción de los Oilers y los devolvió a su amarga realidad. 

“Las cosas están complicadas en el vestidor en este momento, tenemos que hallar la manera de salir de esto”, comentó Bjugstad. “Es muy frustrante, y me incluyo. Necesitamos hacer lo que sea, no importa lo que sea, para conseguir una victoria cuanto antes”.