Sidney Crosby sigue mostrando por qué ya es toda una leyenda de la NHL. Mientras está ayudando a los Pittsburgh Penguins a pelear por uno de los últimos boletos a los Playoffs de la Stanley Cup en la Conferencia Este, también le está dando más lustre a su grandeza.
En la jornada del jueves, Crosby llegó a las 1,000 asistencias en total en su carrera en lo que fue un triunfo de 6-5 de Pittsburgh sobre los Detroit Red Wings en el tiempo extra jugando en casa en la PPG Paints.
Y para que el logro sea aún más dulce, el capitán obtuvo el hito en el gol decisivo. Con 1:40 minutos recorridos en el alargue, Crosby le dio al defensa Erik Karlsson el pase para asegurar la victoria.
"Él es una gran parte de nuestro juego y es una gran razón por la que estamos en la situación en la que estamos, y vamos a necesitar que juegue así hasta el final aquí para tener una oportunidad", dijo Karlsson sobre Crosby. "Si hay algo que ha hecho a lo largo de su carrera es entregar cuando más lo necesitas y hoy no fue diferente a eso".
Crosby se convirtió en el decimocuarto jugador en la historia de la NHL que llega a las 1,000 asistencias. También se convirtió en el séptimo jugador en registrar las 1,000 con una sola franquicia y necesitó el séptimo menor número de partidos para alcanzar el hito (1,269 juegos) detrás de Wayne Gretzky (645 juegos), Mario Lemieux (856 juegos), Paul Coffey (1,105 juegos), Adam Oates (1,174 juegos), Ron Francis (1,235 juegos) y Marcel Dionne (1,259 juegos).