Los vigentes ganadores del Trofeo de los Presidentes — al mejor equipo de la pasada temporada regular — empezaron la campaña 2024-25 de la mejor manera posible, ofreciendo una exhibición de colectividad al vapulear a los Pittsburgh Penguins 6-0 en su partido inaugural, el miércoles en la PPG Paints Arena.
Por si había alguna duda sobre si Nueva York es un contendiente legítimo al título, los dirigidos por Peter Laviolette demostraron varias de sus fortalezas, incluyendo la sólida profundidad de su roster y, quizás lo mejor de todo, una brillante actuación de Igor Shesterkin en la portería.

En una noche plagada de ofensiva, fue Shesterkin — ganador del Trofeo Vezina en la 2021-22 — la pieza central del triunfo de los Rangers, logrando su décimo sexto blanqueo en la NHL.

Con 31 salvadas, el guardameta fue un muro infranqueable, sobre todo en los primeros minutos del encuentro, cuando los Penguins presionaron con intensidad.

“Se siente bien. Conseguimos dos puntos. Gran trabajo”, expresó Shesterkin tras el partido. “Intentaron ir con todo hacia la portería en los primeros 10 minutos. Hicieron un gran trabajo frente a mí... solo traté de jugar mi juego”.

Esta blanqueada no sólo fue significativa por su impacto inmediato en el inicio de la temporada, sino también por su lugar en la historia del equipo.

Los Rangers no habían conseguido dejar en cero a su oponente en un partido inaugural desde el 12 de octubre de 1956, cuando Gump Worsley lo hizo ante los Chicago Blackhawks. Shesterkin se une así a un selecto grupo de porteros que han logrado esta hazaña, incluyendo a leyendas como John Ross Roach, Dave Kerr y Hal Winkler. Además, con esta actuación, Shesterkin es ahora el sexto guardameta en la historia del club en sumar tres victorias en partidos inaugurales de temporada, junto a nombres como Henrik Lundqvist y el propio Worsley.

En el otro lado del hielo, la ofensiva estuvo brillante, con unos Rangers demostrando la pólvora colectiva que poseen. Chris Kreider fue el principal protagonista en el ataque, al aportar dos goles. El delantero oriundo de Boxford, Massachusetts, no sólo fue decisivo en este encuentro, sino que hizo historia al convertirse en el primer jugador en la historia de los Rangers en anotar múltiples tantos en partidos inaugurales de manera consecutiva. Su desempeño fue fundamental para que el equipo de Nueva York marcara al menos seis goles en su debut de temporada por tercera vez en los últimos 40 años.

Panarin fue otra figura clave, con dos asistencias que impulsaron la ofensiva del equipo. Desde el inicio de la pasada temporada, el ruso ha acumulado 35 partidos con múltiples puntos, la quinta cifra más alta en la NHL durante ese período.

Por su parte, Alexis Lafrenière, con un gol y una asistencia, y Jacob Trouba, con dos asistencias, completaron la sólida actuación ofensiva de los Rangers, siendo los otros jugadores en aportar múltiples puntos en Pittsburgh. En general, los Rangers aportaron goles desde cada una de sus cuatro líneas, lo que refleja nuevamente la profundidad del equipo neoyorquino.

"Necesitamos que cada persona en este vestuario juegue al 100% cada noche", comentó Filip Chytil al final del partido. “Creo que lo logramos esta noche. Fue una gran victoria”.

El mensaje de Chytil reflejó la filosofía que Laviolette quiere inculcar en el equipo esta temporada: “Todos deben contribuir”.

El entrenador, quien debutó el miércoles en el banquillo de los Rangers, quedó satisfecho con el rendimiento colectivo, pero destacó la importancia de superar los primeros minutos complicados.

“Tuvimos que aguantar los primeros 10 o 12 minutos. 'Shesty' hizo algunas atrapadas realmente importantes en ese momento”, agregó. “Después, en los últimos, tal vez, ocho minutos del primer período, creo que encendimos nuestra ofensiva. Logramos generar ocasiones y lo mantuvimos en el segundo período también”.

El equipo sabe que este balance entre defensa y ataque es lo que puede llevarlos lejos esta temporada. Laviolette subrayó que el éxito del equipo dependerá de mantener ese enfoque durante toda la campaña. Además de la portería y la ofensiva, la línea azul de los Rangers también estuvo dominante, con un esfuerzo encabezado por el capitán Trouba, quien ahora suma siete puntos en partidos inaugurales con los Rangers — sólo superado por los históricos Brian Leetch y Ron Greschner.

Con esta victoria, los Rangers enviaron un mensaje claro: Este año la meta es terminar lo que se comenzó el año pasado, cuando perdieron en la Final de la Conferencia Este ante los eventuales campeones, los Florida Panthers, y fijar su mirada en la Stanley Cup. Y si lo hecho el miércoles es un reflejo de eso, entonces la escuadra de Nueva York tiene lo necesario para conseguirlo.

El equipo de Nueva York ya demostró que su lema "Se necesita de todos" no es sólo una frase, sino una realidad en su estilo de juego. Con Laviolette al mando y un roster profundo y talentoso, los Rangers podrían estar en camino a una temporada especial.

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