NSH@DAL: Stars y Predators se saludan en protocolo

Tres goles en un increíble tercer período sellaron el debut triunfal de los Dallas Stars en el NHL Winter Classic, para arrancar el 2020 con triunfo de 4-2, sobre los Nashville Predators, ante más de 85 mil personas que abarrotaron el mítico Cotton Bowl, en la realización del primer partido de apertura al aire libre en el estado de Texas, que además de emociones deportivas, derivó importante ganancias fuera la pista, además de fortalecer una rivalidad divisional que cada vez se hace más grande.
Mattias Janmark, Alexander Radulov y Andrej Sekera, se vistieron de héroes con las anotaciones tardías, para conmemorar una tarde ideal, con apenas el tercer triunfo para un conjunto local en el Winter Classic desde su inauguración en el año 2008. Para los Stars, la victoria, fue la séptima de la temporada en la que logran remontar un partido, luego de llegar al tercer parcial, en desventaja.

EFECTIVIDAD EN EL POWER PLAY
Previo al primer partido del 2020, Dallas contaba con un balance total de 40 goles en los terceros períodos, a lo largo de esta campaña. Adicionalmente, los texanos llegaron al cotejo con 19 goles en situaciones de Power Play, para un 17.8 %, que los ubica en el puesto 21 de la liga. Quizás no los números más intimidantes, pero suficientes para llenar de confianza a un roster decidido a lograr la remontada ante sus fieles aficionados.
De esa forma, llegó el empate y la ventaja. Los Stars supieron sacar ventaja de la superioridad numérica con Mattias Janmark para el 2-2, quien por su parte quebró una sequía de dos años sin marcar en Power Play, logrando su cuarto gol de su carrera en ese tipo de situaciones. "Durante todo el partido, jugamos muy bien, creamos oportunidades y siempre quieres ver ese primer gol que te da el impulso de ir por más y justo eso fue lo que sucedió en el tercer período, en el que definitivamente tomamos el control" Destacó Janmark sobre la remontada.

NSH@DAL: Janmark desvía disparo de Klingenberg

Alexander Radulov, con experiencia de siete años en la NHL y su tercero con la camiseta de los Stars, también rompió una larga racha si poder capitalizar situaciones de Power Play, al anotar el 3-2 que prendió la fiesta, tras batir la red de los Predators con un potente remate de zurda, tras el pase preciso de John Klingberg, quien dejó claro que la clave del éxito para poder aprovechar la ventaja de un jugador adicional fue "ganar los face-offs (disputa por el disco al inicio de la jugada), porque así no tienes que luchar para recuperar la posesión. Sabemos que contamos con los jugadores para ganar estas batallas y lo demostramos hoy, especialmente en el Power Play".
RIVALIDAD REVITALIZADA
Otro elemento que destacó en el éxito del partido de apertura del 2020 en la NHL fue la familiaridad de dos rivales divisionales. Desde que los Stars se mudaron a la División Central previo a la temporada 2013-14, la rivalidad con los Predators ha cobrado una intensidad vibrante con episodios claves, como por ejemplo la serie de postemporada del año pasado, cuando Dallas, en calidad de comodín, eliminó en seis juegos, a Nashville, que llegaron como campeones divisionales.
"Realmente no sé si se puede hablar de presión. Pero estaban en disputa dos puntos vitales para nuestras aspiraciones y ganar en casa, frente a nuestra afición es el mejor final posible. Ganar siempre es importante, pero mucho más en un evento de esta magnitud" Declaró Ben Bishop, portero de los Stars, quien terminó la tarde con 31 salvadas.
"Los aficionados de Nashville fueron bastante ruidosos" Admitió el delantero centro de los Stars, Radek Faksa, quien agregó que "tenía muchas expectativas previo al partido y todas fueron superadas. Habíamos esperado por este duelo durante todo el año, poder remontar bajo la emoción y apoyo de nuestros fanáticos no tiene precio, porque nunca los queremos decepcionar. Estoy muy orgulloso de mi equipo". En la tarde, Faksa fue el autor de la asistencia del gol de Andrej Sekera, que selló el triunfo 4-2.

NSH@DAL: Sekera guarda puck suelto a fondo

Culminado el Winter Classic, los Stars y Predators se volverán a ver las caras en dos oportunidades antes del final de la ronda regular, ambas en el mes de marzo.
GANANCIAS Y LEGADO EN TEXAS
La primera realización del Winter Classic en la ciudad de Dallas, sirvió para dar a conocer importantes iniciativas del equipo con la comunidad de esa localidad. Muestra de ello, la gerencia de los Stars premió a más de 500 niños y a sus familias, con entradas para el partido ante los Predators, siendo un obsequio adicional, que se suma a una importante inversión que la franquicia, en conjunto con la NHL, han realizado hacia el Centro Comunitario de St. Phillip, que sirve a 240 estudiantes aproximadamente y atiende a más de tres mil niños, junto con sus familias, anualmente.
En abril del 2019, los Dallas Stars se habían comprometido con una donación comunitaria de alrededor de dos millones de dólares para la construcción de un nuevo complejo multideportivo y para la financiación de actividades extracurriculares durante el verano. La NHL se unió a estos esfuerzos con la donación de una cancha de hockey de calle (pelotas), con el objetivo de impulsar el desarrollo de éste y otros deportes en la localidad texana.
Adicionalmente, los 85,630 espectadores que se dieron cita en el Cotton Bowl, aumentaron a 1,578, 507 asistentes en 29 partidos organizados por la NHL al aire libre. Por si eso fuese poco, el total de personas que acudieron a la edición 2020 del Winter Classic, es la segunda mayor cantidad desde el origen de este cotejo en el año 2008, únicamente superado por las 105,491 personas reunidas en 2014.